La iniciativa ha sido puesta en marcha por la Fundación Orange, en colaboración con la Asociación Gandulín, y tiene como objetivo el bienestar físico, social, cognitivo y emocional, así como el desarrollo del lenguaje y la alfabetización con el fin de facilitar su integración.
La acción está enmarcada en el programa ‘Jugar es Obligatorio’, proyecto que apuesta por una sociedad sin barreras, que la Fundación Orange desarrolla con la organización Fábrica de Palabras.
La Fundación Orange, con el apoyo de la Fábrica de Palabras (Centro especializado en Comunicación Aumentativa y Alternativa (CAA), han hecho entrega de una donación de juguetes y artículos adaptados para los niños/as de la Asociación Gandulin, una organización sin ánimo de lucro dedicada a la CAA que opera en Asturias y que cuenta con más de 190 socios en la región. El objetivo de esta acción no es otro que el de impactar positivamente en su calidad de vida, mejorando su integración y comunicación, de manera lúdica, además de su tiempo de ocio, desarrollo y socialización.
Recibirán dichos juguetes integrantes de la Asociación que tienen edades comprendidas entre 3 y 17 años. Serán beneficiarios de los más de 60 artículos donados, entre los que se incluyen juguetes dirigidos a diferentes rangos de edad, así como elementos adaptados -como brazos articulados y pulsadores-, destinados a facilitar su movilidad, el tipo de ocio y mejorar su interacción con otros compañeros.
Jugar es Obligatorio
Esta iniciativa se enmarca en el programa ‘Jugar es Obligatorio’, desarrollado por la Fundación Orange y La Fábrica de Palabras. En este programa también colabora la Fundación Crecer Jugando a través de su campaña Comparte y Recicla, que busca dar una segunda vida a los juguetes en manos de los niños que más lo necesitan.
Son parte de estos juguetes donados por miles de familias en toda España los que se adaptan, en base a las necesidades de cada uno de los proyectos, apostando por una sociedad sin barreras cuya premisa es la importancia del juego para el bienestar físico, social, cognitivo y emocional de todos los menores, al mismo tiempo que mejora su lenguaje y alfabetización.
Además, como parte de esta colaboración con la Asociación Gandulin, la Fundación Orange y La Fábrica de Palabras ofrecerán una formación personalizada a los 26 profesionales educativos de esta entidad, con el fin de maximizar el aprovechamiento de estos recursos adaptados.
“En la Fundación Orange estamos convencidos de la importancia de apoyar este tipo de iniciativas transformadoras, que no solo proporcionan herramientas esenciales para mejorar la calidad de vida de estos jóvenes, sino que también abren puertas a nuevas oportunidades para su desarrollo personal y educativo. Esta acción es solo una prueba más de cómo la tecnología puede impactar beneficiosamente en la vida de estos niños y niñas, facilitando su integración y participación activa en la sociedad. Nuestro compromiso es seguir apoyando proyectos que construyan una sociedad más inclusiva y sin barreras” afirma Daniel Morales, director de Sostenibilidad y Fundaciones de MASORANGE.